Como reza el conocido aforismo, "si no eres parte de la solución, eres parte del problema". Pues bien, el presidente del Pamesa Valencia, Juan Roig, dejó ayer de ser "la parte del problema" al retirarse discretamente y ceder plenos poderes a Manolo Llorente.
Cinco años después de que algunos avisáramos por todos los cauces (a nivel interno aconsejando -gratis, no como otros- a la gente del club, y a los aficionados vía páginas de prensa y minutos de radio) de que el 'modelo Mercadona' no podía funcionar de ninguna de las maneras en un club deportivo, Roig se ha dado cuenta y hasta ha tenido el valor de reconocerlo en la rueda de prensa de su supuesta despedida; y digo supuesta porque Pamesa continuará cinco años más como patrocinador principal, Roig seguirá siendo el máximo accionista y Llorente, al fin y al cabo, tiene un pasado como 'hombre Mercadona' (como 'chica Almodovar', pero entre frutas y verduras). Antes de ceder, Roig tuvo el detalle -y el buen criterio, por una vez- de cesar al Director General, Víctor Sendra (la otra "parte del problema").
A Juan Roig hay que darle las gracias por todo lo que ha hecho por el baloncesto valenciano, que es mucho. Son muchos los millones de euros gastados en estas dos décadas sin exigir nada a cambio, nada más que tardes de espectáculo y comunión con una grada enfervorecida en las victorias (cuando éstas eran abundantes) y cansada y al borde de la exasperación en las -demasiadas- derrotas de los últimos dos años. De hecho, me gustaría ser el primero en proponer públicamente que a los hermanos Roig se les erija una estatua en la entrada principal de la Fuente de San Luis por su tremenda vocación de servicio al baloncesto de élite en la capital del Turia.
Pero, al tiempo, cabe reflexionar sobre por qué, con tan gran afición por el deporte de la canasta, jamás han confiado en expertos y profesionales del baloncesto para llevar las riendas del club. Ni Amador Alcayde ni Lluís Muñoz ni Víctor Sendra son gente de baloncesto, por mucha experiencia de gestión y títulos de Marketing que tengan. Y trabajar con jugadores no es parecido -ni de cerca- a trabajar con alcachofas.
Confío, sin embargo, plenamente en Manolo Llorente, un buen gestor al que además le gusta mucho el baloncesto. Confío también en que sabrá valorar a la buena gente de la casa como Nacho Rodilla, Johnny Rogers, el maestro Miki Vukovic, Roberto Iñiguez o Angel Fernández, por ejemplo. Su experiencia en el Valencia CF puede servir bastante a la hora de reconducir la triste situación por la que lleva transitando el Pamesa desde hace años. Eso sí, siempre y cuando pase un período de transición (hasta final de temporada) y apueste luego por verdaderos expertos del mundo de la canasta en todos los estamentos del club, incluídos, evidentemente, los de gestión, marketing, comunicación y promoción externa, pues estos serán los que hagan que la Fonteta se llene de nuevo -hace mucho que no hay un 'completo'- y garanticen más ingresos.
Y, a dos temporadas vista, empezar a pensar en títulos, que esto no se arregla en cinco meses; primero, devolver la ilusión a la grada y llenarla de nuevo, además de volver a Europa, y luego, a por los títulos. Paciencia, Manolo. Y tiento, mucho tiento. Que esto no es Mercadona ni el Valencia Club de Fútbol. Es el Pamesa Valencia.
3 comentarios:
Pues yo creo que la mejor solución, y supongo que dolorosa para Juan Roig, sería vender las acciones a otra persona/grupo accionarial. Más de lo que ha hecho Juan Roig por el baloncesto en Valencia dudo que nadie lo haga jamás. Y una vez que estuviese fuera del todo es cuando las alimañas que se han cebado con él tendrían que salir a la calle con la cabeza tapada. Y efectivamente, su gestión ha sido mala vista con 20 años pero sin él, no habría gestión posible porque no tendríamos baloncesto en Valencia.
Little
Completamente de acuerdo, Little, pero, ¿tú sabes la cantidad de gente que se les ha sugerido cuando no eran nadie -juniors-, hace años, y que ahora son 'alguien' en la NBA (Krstic, Khryapa, Biedrins) a lo que algunos han respondido: I eixos, qui son?
Desgraciadamente, ésa ha sido la realidad de los despachos de Pamesa durante muchos años. Y, al tiempo, mi desesperación, porque si un simple periodista, sin medios, como yo, lo sabía en su momento, imagínate todo lo que se puede hacer con un presupuesto, ojeadores, viajes, vídeos, etcétera... para acabar fichando a Stoykov, Stefansson, Drew, Goldwire, Stepp, Douglas y tantas milongas que se han paseado por aquí en los últimos tres años.
@nacho...
Desgraciadamente en el caso de Juan Roig y su gestión en el Pamesa se confirma el dicho de "Zapatero a tus zapatos". Lo grave es decir: ¿y ahora qué? ¿Manolo Llorente puede cambiar el Pamesa? Pues tengo mis dudas (posiblemente influenciado por todo lo malo que se ha dicho de él cuando estaba en el Valencia)
Little
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