28 junio, 2008

¿LA ALEGRIA DE LA HUERTA?

No todos los días una pareja cumple 40 años como matrimonio, y no todos los días se tiene la posibilidad de celebrarlo junto a los más queridos. Hoy era uno de esos días, y la pareja protagonista, mis padres. Para conmemorarlo, mi esposa Beatriz y yo mismo reservamos mesa en un restaurante de la playa de la Malvarrosa al que algunas veces hemos acudido y en el que siempre nos han tratado y servido bien. Su nombre: 'La Alegría de la Huerta'. Desgraciadamente, hoy no ha sido una de esas veces. De entrada, poco espacio para una mesa de ocho comensales debido al lógico abarrotamiento veraniego (si metes a 150 donde sólo caben 100...). Sigo: Servicio triste y lento (15 minutos de reloj para las bebidas, 30 más para los entrantes...). Habíamos llegado a las 14'30 y a las 15'30, por fin, llegó el deseado 'arròs a banda'. Nos lo enseñan, nos lo emplatan y... llega la sorpresa: el arroz está crudo por dentro y ligeramente empastrado por fuera, producto de una cocción demasiado rápida o del poco caldo de pescado empleado a tal efecto. Protestamos. Lo retiran. Nos hacen otro y, mientras (otros 35 minutos), ningún camarero ni responsable del restaurante nos pide disculpas -eso lo primero- ni nos ofrece nada para pasar el tránsito -y el hambre- hasta el segundo 'arròs a banda'. Llega el invento y más de lo mismo: crudo por dentro (se veía blanca hasta la raíz del cereal) y -esta vez- suelto por fuera. Volvemos a protestar. Vuelven a retirarlo. Intuyo que añadirían más caldo -o agua- y volverían a ponerlo al fuego porque en apenas 10 minutos llega un tercer arroz que sigue estando incomible. En medio, un responsable del local se acerca para decirnos con un tonito desagradable "será la primera mala que ha salido hoy, porque nadie ha protestado"; perdone, mi buen señor, que nadie proteste no quiere decir nada, e igual es la primera de la que se le han quejado a la cara, pero no sería la única "mala" cuando a apenas dos mesas de la nuestra también se quejaban de su paella de marisco. Para finalizar, a las 16'30, desistimos del arroz y -como diría mi suegro- con más hambre que Cascorro pedimos unos rápidos lenguados a la plancha que llegan demasiado hechos y completamente secos. Yo, que a medida que avanzaba la tarde me iba calentando (like Human Torch), opto por engullir la mitad del lenguado a golpe de Blanc Pescador, pedir los cafés y que saquen la tarta que habíamos encargado, la cual sueltan en medio de la mesa junto a un cuchillo de generosísimas dimensiones... para que nos la cortemos (la tarta) nosotros mismos. Con los cafés, el camarero le recuerda a mi señora que está prohibido fumar en el local, mientras un camarero se arrea un Marlboro tras la barra y junto a las tapas (además de no estar visible la prohibición por ninguna parte y haber máquina de tabaco y ceniceros).
NOTA: Como comprenderéis, una comida para olvidar de la que ya resarciremos convenientemente a mis padres. Como espero que entendáis, un sitio -'La Alegría de la Huerta'- al que jamás volveremos a ir y del que no guardaremos buen recuerdo. Así pues: Nada recomendable.

5 comentarios:

Alberto Mora Sánchez dijo...

Bar "Bigote" comida hoy para celebrar el santo de mi padre ... todo de puta madre, como siempre, muy conocido aqui en Sanlucar de Barrameda recomendable para todo aquel que se acerque por aqui ;)

Como dices, se arregla con otra comida :)

Anónimo dijo...

a mi también me pasó una buena con mi novia hace una semana, y es que la calidad en verano baja muchísimo. antes iba pero ahora he encontrado sitios mejores también en la playa. dejemos los merenderos para los guiris y que se coman ellos esas paellas insípidas.

Paco Garcia Polit dijo...

Joer Sapena, haberme preguntao. Te puedo decir, así a botepronto, cico sitios a menos de un kilómetro de tan lamentable establecimiento donde hubierais comido como señores.

PD. La próxima vez, pregunta a Polit (aka El Ayatolah de la Malvarrosa)

PD2. Si querías acojonarlos de verdad, haber pedido el libro de reclamaciones. Y se ponen farrucos, llamadita a la OCU. La tontería se les pasaría rapidito...

Anónimo dijo...

un sitio de mierda en verano, por ganar pasta rápido sirven lo primero que hacen y sin miramientos. son lentos y desagradables. y de acuerdo con el polit, hay sitios mucho mejores en la malva.

Anónimo dijo...

quina merda de restaurant, no?