La noticia ha pasado completamente inadvertida, sin pena ni gloria, si no fuera porque el diario 'Levante-EMV' (siempre atento a la actualidad periodística) la ofreció el pasado día 17: Mini Diario ha muerto. Tras 16 años en la calle, y siendo el primer diario gratuito en editarse en España, ha dejado de publicarse. Las deudas lo han fagocitado cruelmente por mucho que el ladrillo intentara reflotarlo en los últimos dos años. Podría contar muchas cosas de los diez años que estuve trabajando en esa casa, siete de ellos como Director con voz pero sin voto (así lo quise) en el Consejo de Administración. Muchas. Como el empeño suicida de los dueños en tener una delegación propia en Alicante a pesar de ser enormemente deficitaria. Como someter la línea editorial del medio al gobernante de turno para conseguir publicidad institucional. Como hacer contrato de discapacitado a una periodista para obtener ventajas ante la Seguridad Social. Como parar varios intentos de huelga por impago de un buen montón de nóminas. Insisto: podría contar muchas cosas. Pero me quedo con toda la gente que conocí en esa década, y a los que jamás traté como más de un jefe de los que conocemos trataría a sus empleados. Redondeando la cifra, aproximadamente una cincuentena de los actuales periodistas y fotógrafos en ejercicio en Valencia se criaron -y mamaron periodismo- en Mini Diario. Los nombres no importan, pero para los mitómanos ahí van unos cuantos: Rafael Meliá, Manolo Montalt, Cristina Marco, Alejandro Navarro, Manuel Furió, Ana Durán, Jimmy Entraigües, Josele Bort, Adolfo Benetó... ¿Cuántos cierres nos comimos en aquella época? ¿Cuantas noches hasta las tantas por un partido del Valencia? ¿Os acordáis del 11-S y de cómo lo vivimos? ¿Y de la ejecución de Miguel Angel Blanco en aquel tenso e intenso fin de semana? Para que los más jóvenes os hagáis una idea, entonces las fotos se revelaban en papel en un cuarto oscuro y se escaneaban para poder montar las páginas, y los textos se hacían en Macintosh Classic, que era como una caja de zapatos con teclado. Era otra época, lo que me hace pensar en que uno ya va teniendo unos años, y aunque a veces gire la vista atrás con nostalgia, al menos sigo vivo.
NOTA: Los que también echan el cierre son los de la web de 'Valéncia Hui' tras la desaparición de la versión en papel, pues llevan sin actualizarla desde ayer (miércoles) a las 9:30 de la mañana. R.I.P. total.